"...Hay veces, que mi ser se cubre de oscuridad, y desearía escapar, muy lejos, a donde nadie me encuentre, y mi alma, pese al dolor, alcanza a guiar, si acaso, a mi mano izquierda..."

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domingo, 15 de septiembre de 2013

Gandhi 1982, Crítica.

 "Podran torturar mi cuerpo, romper mis huesos e incluso matarme. Asi, obtendrán mi cadaver. No mi obediencia".
Gandhi (1982).

  Gandhi.

1982.

188 min.

Reino Unido.

Director: Richard Attenborough.

Guión: John Briley.

Música: Ravi Shankar & George Fenton.

Fotografía: Ronnie Taylor & Billy Williams.

Reparto:

Ben Kingsley: Mahatma Gandhi.
Candice Bergen: Margaret Bourke-White.
Edward Fox: General Dyer.
John Gielgud: Lord Irwin.
Trevor Howard: Judge Broomfield.
John Mills: The Viceroy.
Martin Sheen: Walker.
Ian Charleson: Charlie Andrews.
Athol Fugard: General Smuts.
Günther Maria Halmer: Herman Kallenbach.
Saeed Jaffrey: Sardar Patel.
Geraldine James: Mirabehn.
Alyque Padamsee: Mohammed Ali Jinnah.
Amrish Puri: Khan.
Roshan Seth: Pandit Nehru.

Columbia Pictures.

IMDb: 8.1.
Filmaffinity: 7.4.
Rotten Tomatoes: 89%.
RT Audiencia: 90%.

Una más, por Gandhi (*********).

Biopic sobre Mohandas Karamtchand Mahatma Gandhi, lider espiritual y político de la India; desde  1893, cuando sufre la discriminación del Apartheid en Sudáfrica, hasta el momento de su funeral, el 9 de febrero de 1948. Pasando por su filosofía, la lucha no-violenta por la independencia de la India, así como algunos de los más resonados momentos de su vida, incluyendo sus encarcelamientos, juicios y discursos.

Mucho antes que Sir Ben Kingsley (Krishna Pandit Bhanji) interpretara a algunos de los villanos más ridículos, infames y olvidables del cine, ganó reconocimiento internacional como actor shakesperiano de teatro, y realizando papeles destacados en películas memorables, entre ellas Gandhi, cinta que le valió el Oscar (y no olvidemos La Lista de Schindler). 


Lo bueno.

La ambientación es inigualable y la historia nos lleva calmadamente en la evolución de un hombre que sólo quiere justicia, hasta la figura más emblematica del siglo XX. La película te toca, y si tienes algo de suerte,  e investigas un poco sobre Gandhi, creeme, tu vida cambiará.

Lo mejor.

Las interpretaciones son, en una palabra, soberbias. Hubo gente que se ponía a los pies de Kingsley (todos los "extras" son reales, gente de la India que cooperó), e incluso recibió el visto bueno de los descendientes de Gandhi, en el cast hay algunos reconocidos actores de teatro.


Lo malo.

Se requerirá algo de inteligencia emocional para captar el mensaje de la película, aunque es acertada la forma de crear esa reacción en el espectador. Hay cine para todos, y si alguien sólo quiere una película palomera, de explosiones, sangre y sexo, tiene mucho de dónde escoger, pero esta no es la opción.

Lo peor.

Dura más de tres horas, y aunque no tiene un solo segundo de desperdicio, a quien quiera ver "acción" le parecerá larga, pues el ritmo no es precisamente vertiginoso.

Lo raro.

Ben Kingsley tenía 39 años cuando se estrenó la película, pero nos convence a cada minuto del filme, desde un joven abogado que lucha por sus derechos, hasta un anciano asceta cuya fuerza radica en su espíritu. Kingsley tiene ascendencia indo-musulmana, inglesa y judia, aunque él se define como cuáquero.


Dato Friky.

Si quieren conocer a Lord Richard Attenborough, quien ganó el Oscar como director por Gandhi (la película ganó ocho) basta con ver Jurassic Park, dónde interpreta al jovial John Hammond, gerente de InGen y principal promotor del parque "temático".


¿La recomiendas, dónde me la compro?

Mi calificación para la película es nueve (spoiler), pero la nostalgia me gana, el otro punto se lo doy  por esa alma grande tan bien retratada, diez estrellitas de diez. Es posible comprarla en tiendas especializadas, y se transmite de cuando en cuando en canales culturales. El DVD contiene imágenes de la filmación, entrevistas con Kingsley, y videos de época de Gandhi.

|------------SPOILER------------|

Me hubiera gustado un poco más de la vida "común" de Gandhi, cuando su niñez, su matrimonio (aunque el momento de la narración de éste es muy emotivo), y sobre todo, la muerte de su padre, que es primer punto de inflexión en su vida, si bien la historia comienza en otro; el inicio de una vida de lucha.

Aunque estoy de acuerdo en que este tipo de personajes deben desmitificarse, hay versiones que rayan en lo escatológico (Alexander, por ejemplo), por lo que quizá lo que se muestra es suficiente. El problema es que a partir de un punto de su vida, Gandhi se convirtió en un mito; luego de los 30 años se entregó al celibato, se hizo crudivegano (google no muerde), aseta, y todas aquellas cosas que siempre predicó con el ejemplo, en sus propias palabras; "Sé el cambio que quieras ver en el mundo".

A los cortos de espìritu todo esto les parezca imposible, por la simple razón que ven a un hombre que logró lo que otros no pueden, pero la película refleja muy bien ese aspecto; un hombre sencillo que desea hacer bien las cosas, y privarse de odios y de miedos. Como dijo Albert Einstein al saber de su muerte "Las generaciones del porvenir apenas creerán que un hombre como éste caminó la tierra en carne y hueso".

Algunos verán un imposible personaje unidimensional. Otros, una inigualable representación de quien fue un mito en vida, namasté, Gandhi.




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